La próxima administración federal contempla la construcción de una central eléctrica basada en carbón en el norte de Coahuila, con capacidad de generación de aproximadamente 1,300 megawatts, adelantó esta mañana Armando Guadiana Tijerina, presidente de la Comisión de Energía de la Cámara de Senadores.
En el marco de la celebración de los 25 años de vida de la Comisión Reguladora de Energía (CRE), el legislador por parte del partido Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) dijo a medios de comunicación que la central carboeléctrica contaría con dos unidades de generación de alrededor de 700 MW cada una.Aunque dijo desconocer el lugar exacto y la fecha del inicio de la obra, el senador Guadiana comentó que el equipo de Andrés Manuel López Obrador ya está trabajando en ello.
Ya el equipo de transición que va a la CFE, encabezado por (Manuel) Bartlett, y los ingenieros que están detrás de él, ya están trabajando sobre el tema, refirió.
Al ser cuestionado sobre los compromisos internacionales de México para reducir sus emisiones de contaminantes, el legislador morenista argumentó que la central cumplirá con las normas ambientales y, además, justificó que anualmente China y Estados Unidos destinan grandes volúmenes de carbón para generar electricidad.
China consume 900 millones de toneladas de carbón al año y Estados Unidos 500 millones, afirmó.Asimismo, argumentó que las energías renovables apenas alcanzan 7 por ciento de la generación total del país y no tienen la suficiente potencia que requiere la industria, como la acerera.
Sustentó el proyecto de la carboeléctrica en el costo de la energía. Mientras una planta de ciclo combinado, en promedio, tiene un precio de cerca de un millón de dólares el megawatt, el de carbón está entre los 600 y 800 mil dólares, aseguró Guadiana, al tiempo que aprovechó para criticar las altas importaciones de gas natural que ascienden a 80 por ciento con respecto al consumo nacional.
En cuanto al financiamiento, destacó que se buscará que sea con inversión privada o una asociación con el sector público.Ya no va a haber un peso más de crédito a CFE ni a Pemex, subrayó. Tiene que ser una inversión privada o combinada, pero sin garantizarla con patrimonio de la CFE.
Al respecto, dijo que ya hay interés de algunas empresas globales que aportarían la mayor parte del capital. Sería 49 por ciento por parte del Estado, o menos, apuntó.
Fuente: Energía a Debate 23 de noviembre de 2018