Como parte de la implementación de la reforma energética, el gobierno federal liberó los precios de los combustibles en todo el país y consideró esta acción como “un cambio histórico” que busca crear una mayor competencia en el mercado, y que, en sus primeras etapas, detonó inversiones por 18.2 mil millones de dólares para infraestructura de petrolíferos.

Sin embargo, las autoridades advirtieron que, de detectarse actos de colusión, precios elevados sin justificación o prácticas monopólicas, se suspenderá el esquema liberado y se impondrán costos máximos, además de que habrá severas sanciones económicas y penales a los empresarios gasolineros que incurran en este tipo de acciones.

Ante esto, David Lamb de Valdés, director general de Promoción de Competencia de la Cofece, advirtió que, de detectarse alguna de estas acciones para mantener los precios elevados, las sanciones serán penales o la imposición de multas podrían elevarse hasta el 10 por ciento de los ingresos anuales de las gasolineras.

En conferencia, durante el anunció del nuevo modelo de mercado, Carlos Muñoz Piña, director general de Política de Ingresos No Tributarios de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), dijo que el gobierno mantendrá lo que resta de 2017 y todo 2018, los estímulos fiscales e impuestos flexibles, que permitan suavizar cualquier alza significativa en el mercado.

Afirmó que en caso de que estos beneficios no sean reflejados a los consumidores finales, el gobierno federal “tendrá todo el derecho” de imponer un precio máximo que considere idóneo, en las zonas donde se detecten los abusos y no será retirado hasta que exista la certeza de una verdadera competencia en el mercado.

Guillermo García Alcocer, presidente de la Comisión Reguladora de Energía (CRE), dijo que con la liberación se está haciendo un cambio ” histórico”, que detona inversiones por más de 18.2 mil millones de dólares para la construcción de nueva infraestructura de petrolíferos en el país.

Aseguró que con estas acciones se espera “empoderar” a los consumidores quienes podrán decidir entre una variabilidad de precios y servicios que estarán ofreciendo las 11 mil 774 estaciones de servicio.

El nuevo esquema se aplicó este jueves en los 23 estados de la República que estaban pendientes, y los cuales representan el 40 por ciento del consumo del país, pues se estará aplicando en 7 mil 650 estaciones de servicio distribuidas en los estados del centro del país y de la Península de Yucatán.

A partir de este jueves, la CRE ya no publicará los precios máximos, pues esto ya es responsabilidad de cada permisionario determinar el costo al que ofrecerán los combustibles.

Fuente: Periódico Central